La final de la Supercopa en Paraguay entre Cerro Porteño y Olimpia se presentó un hecho insólito, antes de comenzar el partido fue expulsado el arquero del Cuadro Cerro Porteño, Jean Fernandes, por incitar el público con posibles actos ofensivos los integrantes del VAR le comunicaron al árbitro Éber Aquino y este le mostró la tarjeta roja, Cerro tuvo que colocar a su arquero suplente el partido termino con triunfo de Olimpia tres goles a uno y se coronó campeón de la Supercopa Paraguay 2021.
Cosas que pasan, eso deberían hacer todos los integrantes del VAR en el mundo porque estos no actúan de manera eficaz, solo se limitan actuar cuando el partido inicia, el resto del tiempo son simples convidados de piedra, ahora cabe la pregunta si estos señores harían lo mismo si estos actos se presentan en otros encuentros, porque no faltara quien diga que por su manera de actuar inclinaron la balanza en favor del cuadro ganador y que le quitaron a su figura principal.
Lo cierto es que los señores del VAR y los árbitros en varios países se convierten en los protagonistas y se creen los amos y señores del terreno y nadie les puede decir nada, y si se les reclaman estos hacen lo que les da la gana expulsan al que no les gusta y no hay fuerza ni humana ni divina que les haga cambiar de parecer en sus decisiones, es tanta la arrogancia y el orgullo que estos manejan que es más fácil que un avión de reversa que estos den el brazo a torcer y se echen para atrás en sus decisiones, ojalá estas cosas las aprendan y las tomen todos los que son designados como jueces del VAR y que no se inclinen pagando favores a sus padrinos.
