Tras la muerte del general Qasem Soleimani y Abu Mahdi al Muhandis, el jefe de las Fuerzas de Movilización Popular de Irak, lo reemplazará Ismail Qaani, que tiene los mismos ideales que el genera dado de baja.
Por otra parte legisladores iraquíes votaron para expulsar a todos los extranjeros de su territorio, y anunciaron que no van a cumpir las restricciones en la fabricación de armas nucleares y seguirán con sus programas de enriquecimiento de uranio.
El parlamento de Irak aprobó la resolución en la cual se pide al gobierno acabar con toda presencia extranjera y prohibirles la utilización de su territorio bien sea el espacio aéreo o agua.
Muchas son las amenazas contra el pueblo estadounidense, le toca a la adminstración Trump redoblar la seguridad ya que seguidores de Soleimani han decretado como objetivo militar la Casa Blanca, no pueden pestañear.
Estas retaleaciones no son nuevas cuando se acaba con un terrorista siempre sus lacayos salen a lanzar toda clase de improperios y amenazas, no está por demás tomar medidas para evitar posibles contingencias.

